No lean ésto, es sólo un ataque adolescente...

Me di cuenta de que sería muy gracioso si alguien entrara en mi mente aunque sea por un minuto. No porque pienso cosas interesantes, ni nada por el estilo, es solo que... dentro de mi mente, es como estar en un show, en el que yo soy la estrella, y las cosas cotidianas me sorprenden todo el tiempo, aunque realmente no lo hagan. No puedo evitar analizar todo lo que pasa a mi alrededor, hace que la vida sea un poco mas divertida. Pero lo que más sorprendería creo que es escucharme narrar mi propia historia. Sí, sé que suena raro, pero por ejemplo, si pudieran entrar en mi mente ahora, escucharían algo como: "Se distrajo un minuto de su tarea de historia para dejar correr su creatividad (o falta de ella) en su espacio libre de reglas, su amado blog... aquel que sólo unos pocos leían, que sólo unos pocos entendían, que sólo unos pocos sabían apreciar..." Me imagino que si un psicólogo escuchara mis pensamientos creería que tengo algo así como desorden de doble personalidad. A decir verdad, creo que tengo bien en claro que soy una persona adaptable; por eso es que todavía no sé bien quien soy, porque todo depende de con quien esté, de mi humor, de la música que me acompañe en el momento. Y si se detienen a leer la oración anterior se van a dar cuenta de lo absurdo que fue decir eso y lo contradictoria que soy, bueno, por lo menos en éste momento, con ésta música de fondo, a esta hora.... Necesito dormir un poco, ya ni sé qué estoy escribiendo, prometo intentar que ésta sea la última vez que escribo algo sin leerlo antes de postearlo, pero ahora no tengo ganas, estoy de mal humor. ¿Por qué? Me pone de mal humor que me afecten cosas idiotas, es como ponerse de mal humor porque algo te pone de mal humor... No tiene sentido! AAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHH me enferma ser así, me enferma adolescer y tener estos ataques hormonales en los que uno quiere romper todo y mandar todo bien al carajo, porque si te descuidas y te dejas llevar por esos ataques, después te arrepentís y quedás peor que antes. Ya fue, les dejo una canción de las Pastillas que me encanta! Perdón por hacerles leer esto mediante el título de "No lean ésto" siempre funciona jaja, aunque esta vez en serio no quería que lo leyeran. Es medio mareador. Prometo que el próximo post va a ser de calidad :D

Ya no me encuentro preguntando sobre amor;
Por fin no hay nada que pretenda no saber,
Entiendo qe no hay relación entre amar y envejecer.
Ya no me encuentro preguntando cómo dar;
Por fin comparto, por el miedo de perder,
El milagro de tus caricias
Llegando el amanecer.
Ya no me encuentro conestando un “yo qué sé?”,
Por fin entiendo qe en tus redes yo caí.
Ya no me encuentro preguntándome un “por qué?”.
Por fin entiendo de una vez el “porque sí”
Porqe te vi, te deje entrar,
Cerré la puerta y te elegí.
Porque solo faroles pueden hacer
Que si estoy fané, las pequeñas cosas
Se bañen del brillo de tu ternura
Que transmitís cuando me mirás.

Hoy puedo entender que te gusta el té,
Que odias el café, que no querés rosas,
Que a pesar del vértigo no hay altura
Que impida que me saque el disfraz.
Tirando a matar, dándonos changüí,
puro razonar, puro frenesí.

Siempre fue asi nuestra historia,
Que funcione o no, que esté bien o mal,
Vivirlo con vos para mi es la gloria.
Sin escatimar, sin darnos de más,
Sin acelerar, sin tirar pa’ atrás.
Siempre fue así nuestro asunto;
Le falta de acá, le sobra de allá,
Retocándolo, pero siempre juntos.

Ya no le temo a ese cagón que habita en mi,
Ni a sus ataques tontos de furia precoz;
Distingo excusa y resultado,
Y hoy elijo estar con vos.
Ya no me encuentro figurando en el veraz,
Por fin no debo más que lo que va a venir;
Pago el precio de tenerte,
Darte amor y ser felíz.

Ya no me encuentro contestando un “yo que sé?”,
por fin entiendo que en tus redes yo caí.
Ya no me encuentro preguntándome un “por qué?”.
Por fin entiendo de una vez el “porque si”
Porque te vi, te deje entrar, cerré la puerta y te elegí.
Porque me es imposible de imaginar
Agonía más cruel, más aterradora
Que mi canto y tu danza alejándose;
Uno arriba del tren y otro en la estación.
En los momentos en que quiero escapar
De mi propia piel, vos sos mi doctora;
Con mi panza y tu panza rozándose
No hay poeta que no haga una canción.
Tirando a matar, dándonos changüí,
Puro razonar, puro frenesí.
Siempre fue asinuestra historia,
Que funcione o no, que esté bien o mal,
Vivirlo con vos para mi es la gloria.
Sin escatimar, sin darnos de más,
Sin acelerar, sin tirar pa’ atrás.
Siempre fue así nuestro asunto;
Le falta de acá, le sobra de allá,
Retocándolo, pero siempre juntos.
Siempre juntos.

Sábado a la noche :D

Bel, Na y Sandra acompañaban a la Rubia a su casa después de haber ido al cine a ver Luna Nueva (mucho mejor que Crepúsculo, tengo que decir).

Bel: Chan! qué hacen esos dos paseando el perro a esta hora?
Na: Están disimulando, en realidad estan fumando faso.
Bel: ._. si naa.. si...

Na: no boluda, estan barriendo! Son las tres de la mañana!
Bel: Está disimulando, en realidad está fumando faso.
Na: es verdad!
Bel: re que es la una además, es más normal barrer a la una que a las tres...
Sandra: si, esa soy yo dentro de unos años :(

Después de dejarla a la Rubia, volvieron a pasar por la esquina y...

Na: Mirá boluda! viste que estaban fumando porro!? Yo te dije, es que es legal si paseas al perro, yo esa ya me la conozco
Bel:  : /
Na: !! Miralos a esos, están tocando la guitarra
Bel: A esos sólo les falta el perro...
Na: no, esos tienen un labrador ahi, fijate
Bel: :O es verdad!

Llegando a lo de Na...

Na: calentamos fideos?
Bel: A esta hora???
Na: sí
Bel: ok :D

¿Cómo matar una cucaracha?

Esperar a que la misma se quede quieta en un lugar (para ésto usted debe quedarse quieto sin respirar, las muy guachas son rápidas)
Tomar un zapato o algo que se le parezca (puede hacerlo antes así la cucaracha no se da cuenta de que van a asesinarla)
Rapidamente aplastarla con el calzado (debe asegurarse de que el bicho desprenda un líquido blancuzco asqueroso)

Nota: probablemente si usted ha visto una cucaracha, al poco tiempo verá otra. Llame a un exterminador.

Otro sabor

"Oh" exclamó. Así era. Toda una vida preguntándose cómo sería, cuando sería, si dolería. No sentía ni frío ni calor, eso era todo una mentira ¿Cómo sentir frío si esa parte de su cerebro ya estaba paralizada? Tampoco podría decir que vio toda su vida pasar frente a sus ojos en un segundo, si hasta el momento no había podido, tampoco ahora lo lograría. Su mente no se dirigió hacia sus seres queridos o a recuerdos felices. No pensó en tratar de sobrevivir, ya lo había asumido, ese era el fin. Además, tenía que admitirlo, estaba a punto de descubrir un gran secreto, no podía negarse a esa oportunidad. Ni extrema tristeza, ni felicidad abundante. Sólo un vacío. Un vacío que quería llenar, sentía la necesidad de llenarlo. Quería chocolate. Sí, chocolate. Nunca lo había probado, pero en ese momento en lo único que podía pensar era en comer chocolate. No vio la luz, inventos comerciales. Él deseaba con todo su corazón, o lo que quedaba de él, un poco de chocolate. La desesperación lo abrumaba,  no soportaba ese sabor a gris que tenía la muerte. Cuando creyó que no aguantaba más lo sintió. No tenía idea de cómo sabía, pero estaba seguro de que era chocolate ¿Qué otra cosa podía ser? Cerró los ojos y sonrió por dentro.










Hola gente. Juanma, si por casualidad se te ocurrió pasar por este humilde blog y leer este humilde cuento (¿cuento? bueno, como sea) perdón que te haya robado esa mínima parte, no tengo inspiración, no sé si lo notas. Adios :)

Dibujo: parte III

 Así quedó mi amado ♥ igual, la parte negra me quedó mal... quizás lo arregle antes de dárselo a mi amigo :)

Perturbante

No sé si es algo que les pasa a los bloggers en general o es simplemente una locura mía, pero cuando estoy sola, específicamente en la calle, todo me da ideas para escribir un post en mi blog. Hoy, por ejemplo, después de la rabia que me dio llegar al campo de deportes y encontrar el cartelito que decía "actividad suspendida" (sobre todo después de haber tenido que pasar por la calle de los obreros), me dispuse a calmarme y disfrutar del río. Me habría sacado fotos, pero con la inseguridad de ahora ni siquiera al lado de prefectura uno se siente feliz para sacar su cámara recién comprada con los ahorros de la fiesta de quince; cualquiera que no lleve traje tiene pinta de querer robarte (sí, el síndrome del comprador perseguido). La cosa es que después de respirar un poco de aire porteño y atarme los cordones en un banco de puerto madero se me ocurrió un juego. Estereotipar a cada persona que pasara al lado mío. Había de todo: madres solteras, fracasados, maestras de cuarto grado, cuarentón que vive con la madre, empresario con el pene chico. Realmente fue divertido y ayudó a despejarme. Cuando llegué al colegio me di cuenta de que todos los días veía gente rara en el subte, en el colectivo, en las calles, en el cole... parecía que pasaban desapercibidos pero en realidad siempre hay alguien que desvía la mirada de sus apuntes o de su libro para observar a su alrededor. Por ejemplo, el otro día viajaba con mi papá en la línea D del subte; yo estaba sentada comiendome un paquete de melbas y él parado hablando con mamá. A mi lado había un muchacho de unos 26 años y un nene de esos que venden cosas. En el asiento opuesto había una señora. A simple vista era una señora común y corriente, pero algo me llamó la atención de ella. Su mirada... era perturbadora. Parecía aterrada, como si estuviera viendo un fantasma; y nadie lo notaba. Nadie le preguntó qué le pasaba, si estaba bien. Nada. Estación 9 de julio, combinación con las líneas B y C. Nos bajamos y, aunque las puertas se cerraron detrás de nosotros, seguí con la mirada a la mujer que seguía viendo con el mismo horror en su cara aquél rincón del subte.
Así como esta mujer, día a día me encuentro con gente loca, desalineada, interesante, atractiva... que me parece que merece un espacio en mi blog :) por lo menos para rellenar cuando no tenga nada interesante para contar.

Dibujo: parte II

Estoy avanzandoo :D miren miren

 

 

En la cámara parecían más nítidas, diganmelo: no sé sacar fotos jaja Bueno es para que más o menos se den una idea :) Me voy a estudiar geografía gente, adios.

Dibujo: parte I

Colgué, colgué, colgué con el blog. Es que estoy haciendo un dibujo que me está quedando re wachii ♥ Mirad:

 

 

 

Jeje me re vicié sacandole fotos, es que estoy enamorada de mi creación. Después irá a parar a manos extranjeras, pobre, extrañará a su madre, es que la muy idiota perdió el trabajo práctico de su amigo y como bien dijo él, ella es muy influenciable por la culpa. Bueno no importa, cuando lo termine le voy a sacar ochocientas fotos así queda inmortalizado en mi compu :D Mañana subo la parte II con la parte azul ya pintada :) Me voy a dormir, adios.

Hora Libre de Francés

Ubicación: Piso brilloso del CNBA
Personajes: Haru (occidental team), Isi (oriental team), Meli (oriental team), Belu (occ. team)

...
Haru: Pero... osea, existe una palabra en chino que signifique chiste?
Meli: si!
Isi: osea si, ahora sí, pero en realidad el chiste no es algo originario de china
Belu: jajaja osea que ustedes no hacen chistes al estilo "entra un occidental al bar..."
Isi: ¬¬ no
Meli: pero existen los chistes chinos! adjsahdjkaj (empezó a hablar en chino)
Isi: JAJAJAJ
Belu: .... jajajaj Meli! sos una grosa! en serio, sos muy graciosa amiga
Haru: jajajajaja
Isi: ¬¬
Haru: y una palabra para el verbo "reir"?
Isi: obvio boluda
Belu: re que no se reian jaja venia un chinito riendose, entonces su amigo se pone a gritar "ayuda! ayuda! a mi amigo se le deformó la cara!!" cuack ._.
Haru: PPPFFFFAJAJJAJAJAJAJAJAJJAJAJJA (revolcandose en el piso)




Amo hacerte reir con las boludeces que digo :)

Corto y Conciso

Y por esos tiempos vivía el hombre con su rosa, guardada, alejada de los peligros del mundo, alejada de la belleza del mundo, invisible para todos menos para él, su único dueño, su único amor...

Intentó estudiar

Lee, subraya, lee, subraya, escucha la guitarra, lee, escucha la canción, relee, presta atención a la letra, habla de una pareja, ella no quiere una pareja, quiere un amigo, quiere importarle a él, no le gusta pero lo quiere, mira la puerta, no está, lee la misma oración, cierra los ojos, respira, se concentra en la música, golpea la mesa, quiere estudiar, no puede, mira el reloj, queda poco tiempo, mira la hoja, falta mucho, vuelve a mirar la puerta, no viene, se para, compra agua, no tiene sed, toma el agua, se sienta, mira el reloj, lee otra oración, relee, subraya, mira la puerta, no llega, mira el reloj, es la hora de irse, guarda sus cosas, escucha la guitarra, toma la mochila y el agua, lo ve consolando a alguien, imagina lo que habrá pasado, se pregunta si él la tendrá en cuenta, no le importa, mira la hora, sube las escaleras, se va.



Tenía que poner un textito a lo Manuel Puig ♥

Lo había hecho miles de veces, sabía cómo debía hacerlo, en qué momento y qué hacer si algo salía mal. Sentía la lona del trampolín tersa bajo sus pies cubiertos por sus badanas favoritas. Eran una especie de zapatillas de baile especiales para el deporte que practicaba, la gimnasia acrobática. Suspiró, saludo a los jueces, al público y luego de guiñarle un ojo a su entrenador comenzó a saltar. Cada salto era más alto y sentía que tocaba el techo. Un mortal hacia atrás, uno hacia delante, otro hacia atras, uno más hacia adelante. Estaba concentrada en caer siempre en la cruz roja que se ubicaba en el centro del trampolín, no quería que le quitaran puntos. Y en cada acorbacia recordaba estirar las puntas de los pies, los brazos pegados al cuerpo, los dedos juntos. Era un placer verla realizar su serie con tanta soltura y seguridad, era una gimnasta hecha y derecha. Finalmente llegó el momento del último ejercicio. No era el más difícil pero sí el que más la aterraba. Saltó bien alto y mientras elevaba sus piernas, estiraba sus brazos hacia arriba, quedando así en posición de paloma. Parecía un ángel. Lo estaba logrando, finalmente podría hacerlo. Nunca supo por qué, pero en ese instante, su conciencia la abandonó dejándola sola en el aire frente a su peor enemigo. Era un cuerpo sin mente, inútil e inerte. Cuando la conciencia decidió regresar ya todo había terminado, no solo su cuerpo se cubrió de severas heridas, sino que también sus sueños se habían roto en mil pedazos.









Hola gente, el que sea que este leyendo ésto... quería decir algo de este cuento; es posible que no lo entiendan, que conste que traté de usar el vocabulario menos específico que pude. Y otra cosa, a mi no me gustó, pero es verdad que si no fuiste gimnasta, lo más probable es que no te transmita nada... Gracias :D

No vivió el morir

Una explosión. Sí, estaba segura de ello. Luego seguirían la matanza, la agonía y la muerte, o peor, la tortura. No lo entendía, no podía ver qué tenía que ver ella en todo ese desorden social. El represor, el subversivo, el represor, el subversivo; los dos eran lo mismo, asesinos. Odiaba esa situación. Su padre era una buena persona, no le hacía mal a nadie. Dudaba de que alguna vez en su vida haya visto morir a alguien. Lo único que hacía era llevar el pan a la mesa ¿Por qué tenía que soportar él también la tortura que otros merecían?
Pensó rápido, tomó todos sus ahorros, los guardó en el corpiño y se decidió a escapar por la ventana. Lo había hecho miles de veces, no había riesgo de caerse. Ni bien sus pies tocaron el suelo corrió lo más rápido que pudo. No hubo tiempo para pensar hacia dónde, ni para recordar las palabras de sus padres, sólo sabía que debía huir de allí antes de que lograran atraparla. No paró hasta estar segura de que no la hallarían. Se ocultó en una fábrica que, a juzgar por su estado, había sufrido un incendio meses atrás.
Todo estaba oscuro, no habría sido una mala idea llevar consigo una linterna. Caminó con cuidado de no hacer mucho ruido, pero las ratas la delataban. Un aullido. Eso no había sido una rata, era... una chica. Sus ojos por fin se acostumbraron a la oscuridad, entonces la vio. Llevaba puesto un camisón sucio y nada más, sus pies estaban descalzos y lastimados. Debía de tener dos o tres años menos que ella. Se acercó un poco más para poder observarla mejor. La niña, asustada, dio unos pasos hacia atrás y la escaneó con la mirada. Rápidamente notó el collar que le había regalado su padre. Era una de las primeras insignias que había recibido en el ejército. Otra explosión, esta vez como un fuego artificial. Un dolor agudo en los riñones. Sangre. Mucha sangre. Finalmente comprendió.

Como si nunca hubiera existido...

¿Cómo amar tanto a alguien? ¿Cómo odiar tanto a alguien? ¿Cómo perdonar tanta traición? ¿Cómo llorar sobre el cuerpo de mi amada? ¿Cómo evitar sentirse culpable? ¿Cómo haber querido olvidar el aroma de su pelo? ¿Cómo no sentir asco de mis manos llenas de su sangre? Pero a la vez ¿Cómo no amar ese líquido rubí, si es lo único que fue solamente suyo? ¿Cómo no sentirse orgulloso? ¿Cómo no mirarse al espejo con admiración frente a la imagen de un hombre liberado? ¿Cómo odiarse, si sabía que no había otra salida? Y aún así ¿Cómo permanecer frente tal belleza? ¿Cómo permanecer ante tal deformidad? ¿Cómo no agradecer los 22 pisos y la soledad? ¿Cómo no adorar el viento en el rostro?

Otra noche...

Y llegó otra noche más. Su madre la recibió con esa cara depresiva que había tenido desde hacía unas semanas. Despidió a su amigo y entró al auto con una sonrisa que se borró ni bien este comenzó a recorrer las calles de la capital. La radio intentaba tapar el silencio incómodo de todos los días, hablando de cosas triviales como de "cuáles eran los insultos que se decían antes y ahora se dejaron de usar". Ella trataba de prestar atención al hombre que hablaba y hablaba sin parar, o por lo menos trataba de hacerle creer a la madre que estaba prestando atención. Pese a todos sus intentos por mantenerla callada, ésta prefería una conversación forzada a un viaje sin palabras. Preguntó sobre el colegio, "ninguna novedad" como siempre, y luego, de nuevo el silencio, el cual se mantuvo hasta llegar al hogar. Entró, dejó sus cosas en un sillón y se dispuso a cenar en paz. De vez en cuando aparecía su hermano y lograba sacarle una sonrisa, siempre lo lograba. Terminó, limpió sus cosas y esperó en la computadora hasta bien entrada la noche. Su hermano dormía, su madre todavía no, ella tampoco podía conciliar el sueño. La saludó con un beso y un fuerte abrazo que recitaba que todo iba a estar mejor. Los ojos secos se mantuvieron hasta llegar a la habitación. La oscuridad la ayudaba, era más fácil sacarse la careta si nadie la estaba viendo u oyendo. Se acostó y comenzó el show. Ya se lo sabía de memoria, sabía exactamente qué tenía que hacer para que su llanto no despertara a su hermano. Las lágrimas empapaban su almohada, no tenía vergüenza de llorar con ella en frente, ella nunca la juzgaba, ni se sentía triste al verla en ese estado. El otro hermano todavía no llegaba, tenía unos minutos más de libertad. Escuchó la puerta, de nuevo la máscara. No quería, no la dejaba respirar, pero debía. Se limpió la cara, cerró los ojos y esperó a que el mayor se acostara. Agradeció que estuviera todo oscuro, no quería que la viera así. Huyó al baño, se miró al espejo. No estaba tan mal, sólo tenía los ojos hinchados y algunos brotes en la cara, lo esperado. Aguardó hasta que su respiración se normalizó, para luego volver a su habitación e intentar dormir. El dolor de cabeza lo dificultaría, pero ya estaba acostumbrada a todo eso. Al fin, pudo dormir. Vio la luz, otro día comenzaba; entonces, la careta nuevamente.