La Paz voy a encontrarla mañana. O tal vez ya la encontré y es sólo que me es una total desconocida. Mañana voy a La Paz, o la paz viene a mi, no se.
Quedarme en una plaza, cantar, jugar, mostrar mi arte. Eso no me lo quita nadie. Eso es la paz. Cambiar una canción, cantarla de forma divertida. Bailar en el medio de la plaza hasta quedarse sin aire. Son quince segundos sobre el asfalto lanzando colores al aire, sonreír y recibir una recompensa por ello. Merendar algo que no se que es en la calle y pagarlo con paz. Conocer a alguien y desearle lo mejor, sabiendo que el también te lo desea sinceramente. Aunque no nos volvamos a ver. Aunque apenas recuerde su nombre mañana. Ofrecerle tu casa a un holandés, un alemán, unas japonesas o unos brasileros. O a esos de ahí, que viven en Castelar, a esos también. De hecho, a esos mas que a nadie. La amistad a primera vista es la paz. Una promesa de asado es la paz. Un oído, una reprimenda, ser cargada por un pueblo súper empinado cual cleopatra. Levantarse a las ocho de la mañana para acompañar a ese que acabas de conocer. Porque sólo fueron seis días, pero valieron por mil. Confesar un amor no deseado. Hacer la segunda. Cantar. Cantar. Cantar. Hacer musica. El arte. El vértigo. Trepar sin protección. Confiar sólo en tus piernas y en tus manos. Respirar. Mirar el cielo. Las estrellas como nunca. Como nunca. Ver una, dos, tres, muchas estrellas caer. Pedir deseos sin desearlos. Desear solo estar donde, cuando y con quien estas. Desear algo mas. Desear paz.
domingo, 25 de enero de 2015
La Paz
Publicado por Belu.M a las 19:40
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